Recibo un anónimo que dice: miro Cenicienta en dibujo animado y pienso en vos.
Descartando que se trata de una comparación de corte humorístico, que el señor anónimo quiere decirme subliminalmente que soy un dibujo animado, decodificando el comentario como cualquier mujer lo haría, es decir, llevándolo al extremo más romántico y sentimental de todos los extremos, podría decirse que está casi a la altura del "quedate tranquila que estoy pensando en vos"
De hecho, suena igual: igual de infiel, igual de traidor, igual de sucio, igual de no exclusivo.
La diferencia, lo que me quita cualquier cargo, es que lo escribe un desconocido anónimo y no yo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario